En los últimos días, las redes sociales se han visto sacudidas por una historia que mezcla identidad de marca, orgullo nacional y, sobre todo, comunidad. La protagonista: Frisby, la emblemática cadena colombiana de pollo frito que ha acompañado a generaciones. ¿El detonante? Una supuesta copia en Europa que levantó una verdadera ola de reacciones online.
¿Plagio internacional?
Todo empezó cuando los usuarios empezaron a notar la existencia de una empresa registrada en España como Frisby España S.L., que abrió restaurantes en territorio europeo con una propuesta visual sorprendentemente parecida a la de Frisby Colombia. Desde los colores y la estética de marca, hasta una mascota casi idéntica, el parecido no pasó desapercibido.
El revuelo fue tal que Frisby Colombia emitió un comunicado aclarando que no tienen ninguna relación con esa empresa en Europa. Y fue ahí cuando la historia realmente estalló…
El poder de una lovemark
Apenas el comunicado se hizo público, las redes sociales explotaron. Los colombianos —y buena parte de la comunidad digital— respondieron con memes, mensajes de apoyo, videos creativos e incluso campañas espontáneas en defensa de la marca nacional.
Este fenómeno nos recuerda que Frisby no es solo una empresa de pollo frito, es una lovemark: una marca que ha logrado conectar emocionalmente con su audiencia, que trasciende el producto y se convierte en parte de la cultura popular.
Una comunidad que responde
Lo más interesante del caso no fue solo la indignación, sino la creatividad que despertó. Desde reels en defensa del «pollo original», hasta marcas aliadas y usuarios compartiendo sus recuerdos con Frisby, el contenido generado por la comunidad fue abrumador.
Y lo mejor: Frisby supo responder a tiempo, agradeciendo el respaldo y sumándose a la conversación de manera empática, auténtica y oportuna. Una lección maestra de gestión de crisis con alma de marca.
¿Qué aprendizajes nos deja este caso?
Este episodio es mucho más que una anécdota viral. Aquí hay lecciones clave para marcas grandes, pequeñas o personales:
- 🧠 La IA como aliada: Herramientas de inteligencia artificial permitieron a creadores de contenido y marcas generar piezas virales rápidamente, amplificando el mensaje en tiempo real.
- 🧱 El valor del branding bien hecho: Frisby ha invertido años en construir una marca sólida, coherente y querida. Cuando eso está bien trabajado, es difícil de imitar.
- ❤️ Una comunidad no se copia: Puedes replicar el logo, los colores, incluso la mascota. Pero una comunidad construida con autenticidad y cariño no se falsifica. Se cuida, se cultiva y se refuerza todos los días.
En resumen…
Este no fue un caso de branding más. Fue una demostración del poder de una marca amada, del alcance de una comunidad comprometida y del rol que juegan hoy las redes en proteger lo que sentimos como propio.
Porque cuando una marca logra conectar de verdad, su audiencia no solo compra… también la defiende.
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